Historia
Al hablar de la historia del Ángel de la Independencia debemos remontarnos al año de 1843 cuando se convoca un concurso para un proyecto de construcción de un monumento que celebrase la independencia de México bajo la presidencia de Antonio López de Santa Ana. Para esa fecha se colocó la primera piedra en la plancha del Zócalo del centro histórico capitalino, pero se vio interrumpida su construcción por falta de presupuesto y cambio en el poder ejecutivo.
Para 1886 se retomó el proyecto y se abrió nuevamente el concurso mudando su ubicación al Paseo de la Reforma. Varios inconvenientes en lo que respecta a daños estructurales en su construcción hicieron demoler lo que se había adelantado, nombrándose en 1907 un nuevo equipo ejecutor logrando culminar e inaugurar la obra el 16 de septiembre de 1910 por el entonces presidente Porfirio Díaz en el marco de la celebración del Centenario de la Independencia de México. El terremoto suscitado para 1957 originó la caída de la victoria alada, lo que motivó un proceso de restauración para reforzar la estructura y se reemplaza por una nueva victoria alada, conservando la cabeza de la antigua en el Archivo HIstórico de la ciudad.
Monumento a la libertad
La columna es de inspiración romana como la columna de Trajano y tiene una altura de 49,5 mts incorporando la longitud que se le ha adicionado con la construcción de las gradas y que demuestra el hundimiento de la ciudad por sus características topográficas. El despliegue libre de las alas simbolizan la libertad y es lo que caracteriza a la Victoria Alada, escultura hueca de bronce. Su brazo derecho se adelanta al frente con una corona de laurel en su mano como símbolo de obsequio y honra a los héroes caídos.
El otro brazo apunta hacia abajo y en la mano una cadena rota con tres eslabones representando a los tres siglos de Virreinato vividos bajo el dominio español. La superficie de la escultura hecha en bronce, está recubierta por un pan de oro de 24 quilates que resplandece al recibir luz. La Victoria alada es sostenida por una terraza al cual se le accede por un cubículo con puerta al oriente y que la recorre en todo su perímetro, resguardadas por rejillas o barandas de bronces repujado.
El capitel de la columna que soporta este mirador está revestido por volutas. hojas de acanto y cuatro águilas con alas desplegadas repartidas en los cuatro lados. Debajo del capitel se erige la columna adornada con relieves de guirnaldas de encino con anillos que circundan la columna y medallones florales. En dos de ellos se destacan los nombres de ocho próceres de la independencia. Las guirnaldas parten de cuatro cabezas de leones en relieve repartidas en el anillo inferior. En el pedestal de base cuadrada que soporta la columna, se halla un grupo escultórico llamado “Apoteosis del Padre de la Patria” conformada por tres esculturas, dos de ellas alegorías.
La principal, de pie portando una bandera mexicana, el cura Miguel Hidalgo. La primera alegoría, al sur, sedente portando una pluma y un libro, la musa de la Historia. La otra, al norte en posición de levantarse y ofreciendo una corona de laurel a Miguel Hidalgo, la Patria. En un nivel más bajo se encuentran repartidas a lo largo del cuadrado y a los extremos del pedestal cuatro esculturas de héroes de la patria: José María Morelos, Francisco Xavier Mina, Nicolás Bravo y Vicente Guerrero. Debajo de ellas en la cara norte y sur del pedestal, se encuentran dos rosetones que tienen como función de tragaluz para llevarla al interior del monumento.
En las caras se hallan esculpidas hojas de acanto, laurel y dos fasces romanos. Debajo remata su inscripción con las fechas de inicio y proclamación de la Independencia mexicana, 1810-1821, en la fachada oriental en un escudo ornamental. El escudo reposa sobre una placa de mármol que expresa “LA NACIÓN A LOS HÉROES DE LA INDEPENDENCIA”. En la cara oriente se grabó en mármol en tiempos recientes la historia del monumento.
Este primer cuerpo de pedestal te invita al descanso y observar la escultura de un león macho que es guiado por la figura de un niño que simboliza la fuerza y la inteligencia. En el borde hallamos cuatro pedestales coronados por cuatro esculturas alegóricas sedentes: la Paz, la Guerra, la Justicia y la Ley. Debajo de éstas en sus bases se encuentran inscritos los nombres de 24 héroes de la independencia mexicana divididos por categorías. En esta área al oriente se accede por una reja de hierro y bronce al interior del monumento. Al costado sur hay ornamentaciones con figuras grecorromanas y al costado norte figuras mexicanas como el Dios Quetzalcoatl.
En el interior se encuentra la zona funeraria portadora de urnas al cual se le llega por pasillos. Para subir al mirador se llega a un gran vestíbulo que accede a la escalera de caracol que conduce al mirador. Los turistas acceden al mismo subiendo 200 escalones en grupos de a seis personas.
Esculturas
Según el proyecto original, todas las esculturas debían de realizarse en mármol. Se mantuvo lo proyectado sólo las que se encuentran en el nivel superior, realizadas en francia con mármol de Carrara, ultimando sus detalles una vez llegadas a México para facilitar su transportación. El resto de las esculturas se realizaron con la técnica de la cera perdida. Realizadas primero en yeso para ser transportadas a Florencia, Italia, utilizadas como molde para su realización en bronce.
La escultura del Ángel resulta ser la deidad Niké, representación griega de la victoria alada. Las estatuas de las cuatro alegorías sedentes son representaciones de diosas griegas pero con ciertas omisiones como es el caso de la Guerra (diosa Atenea) y su escudo en forma de medusa y el cambio de una lanza por la espada que originalmente porta.
Monumento Funerario
Para 1925 se decidió trasladar algunos restos de próceres y héroes patrios de la independencia al interior del monumento, depositados en urnas y colocados en nichos improvisados. En el 2010 se decide exhumar los restos, trasladarlos para su correcta conservación en el Museo de la Historia en el Castillo de Chapultepec para ser honrados posteriormente en el Palacio Nacional.
Ícono de la Ciudad de México
Este monumento se ha convertido en uno de los principales íconos de la Ciudad de México por su estilo ornamental, de ambiciosa altura considerando su estilo mixto en la técnica: escultura, columna conmemorativa y mausoleo. Resulta de gran belleza por sus cuadros escultóricos, intercalada por el sistema de columnas que le da su destacada altura y por la utilización de materiales nobles como el mármol. Es leitmotiv obligada para la toma de fotos de bodas, quince años, graduaciones académicas y recuerdos de viajeros de paso por la Ciudad de México.
También es sitio de celebración de triunfos de equipos deportivos, manifestaciones, telón de fondo de grandes eventos, conciertos, entre otros. Así mismo su imagen está siendo utilizada como símbolo de exportación del turismo mexicano obsequiando mini esculturas a otros países para promover la ciudad como destino turístico. El Ángel de la Independencia por ser el monumento más importante que conmemora la independencia mexicana, ha sido motivo de restauraciones para ponerlo a tono con la venidera celebración de los 200 años y reparar los posibles daños sufridos en el terremoto del 2017. De esta manera el firmamento mexicano se engalanará con un remozado Ángel ícono de la celebraciones venideras.